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No, los fuegos de jardín están diseñados específicamente para su uso en exteriores o en espacios en los que al menos un 25% de la superficie total de las paredes esté abierto, como terrazas cubiertas o algunos porches.

El único gas que debe utilizarse en los fuegos de jardín es gas propano.
Gasifica bien a bajas temperaturas (incluso por debajo de -10ºC) y no pierde presión cuando lo utilizamos en aparatos de alto rendimiento, a diferencia del butano.
La botella BUTSIR PRO, es el único modelo de 5 kg del mercado nacional.

Sí, los fuegos de jardín calientan como una chimenea convencional gracias al propano. El gas propano tiene un elevado poder calorífico a diferencia de otros combustibles como el bioetanol, que produce una
llama mucho menos visible y que apenas calienta.

Además del fuego, los troncos cerámicos y las piedras volcánicas también ayudan a mantener el calor incluso con el fuego apagado. De hecho, se aconseja dejar enfriar un mínimo de 30 minutos los troncos y la piedra antes de colocar la funda protectora, ya que pueden mantenerse calientes durante largo tiempo dependiendo de la temperatura exterior.

Efectivamente, la llama de todos los fuegos de jardín es regulable. Basta con girar más o menos el mando de salida del gas, incluido en todos los modelos.

Con el viento la llama actuará como lo haría en un fuego de leña natural.
Para que no fluctúe demasiado lo óptimo será protegerla con el cristal templado protector, un cristal especialmente tratado para resistir altas temperaturas.

Importante: El cristal alcanza una temperatura muy elevada al poco rato de encenderse el fuego, por lo que no debemos tocarlo. Todos los cristales BUTSIR llevan un símbolo para recordarlo.

Si se apaga la llama no hay problema, el sistema termopar bloqueará automáticamente la salida del gas evitando cualquier fuga.

El encendido es mediante piezoeléctrico, funcionan con una pila alcalina AA. La llama se enciende presionando el botón de ignición y girando hacia la izquierda el mando de control para abrir el paso del gas. Hay que mantener presionado el mando unos 10 segundos para que, al dejar de presionar, la llama no se apague.

Puedes verlo en este videotutorial.

Para cerrar el paso al gas y apagar el fuego de jardín, basta con girar el mando al punto de partida y la llama se extinguirá sola. A continuación es recomendable cerrar el paso de gas del regulador de la botella BUTSIR PRO.

¡Es muy sencillo! Te lo mostramos en este videotutorial. 

¡Seguridad ante todo! Los fuegos de jardín incorporan un sistema llamado termopar que cierra la salida del gas si detecta apagado de la llama por viento o por otras circunstancias.

Sí, los fuegos pueden mantenerse en el exterior cubiertos con la funda protectora, aunque siempre que sea posible recomendamos su almacenaje en un lugar seco y bien ventilado. Sobre todo los que tienen
cubierta de teca, que puede verse afectada por la humedad.

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